Políticamente Incorrecto
Releyendo una de mis antiguas revistas Muy Interesante, encontré ésta columna de Miguel Angel Sabadell, que al margen del chiste fácil (es muy interesante), me resultó curiosa la relación que ví entre la sencillez del blog de este hombre, con la buena calidad del texto, y de que haya sido publicado en tal revista.
El ser humano prefiere un manto protector, una ideología a la que agarrarse o un pulgar que chupar, antes que arriesgarse y atreverse a.. pensar.
Vivimos en una civilización tecnológica, pero la nuestra es una sociedad mágica. Encendemos la luz y no la comprendemos; abrimos todos los días la heladera y desconocemos la Segunda Ley de la Termodinámica. ¿Pero es necesario conocerla? No, no necesitamos saber cómo se hace el pan para comerlo; ni entender la biología del caballo para montarlo. Pero sí deberíamos tener claro para qué sirve de verdad la ciencia. Para muchos, incluídos la mayoría de los intelectuales, la ciencia es como una caja negra a la que se le pide la solución de nuestros problemas médicos o ambientales. Muy pocos aceptan que sea un modo de pensamiento, y aún menos que forme parte de la cultura.
La belleza de la ciencia está en que nos induce a un cierto ascetismo al pensar; a no dejarnos llevar por nuestras ideas preconcebidas más queridas; a poner a prueba hasta el mínimo detalle; a ser críticos, a dudar.
La duda metódica es el cimiento de una mente lúcida. No valen las ideologías, ni los gurús; sólo las ideas segregadas por el cerebro. Unicamente existe un legislador último y definitivo: la realidad. Si nuestras ideas no se ajustan a la experiencia, por muy políticamente correctas que sean, debemos desecharlas. Pero no es fácil vivir así.
Decía Aristóteles que "las ciencias tienen las raíces amargas, pero muy dulces frutos", y ése es el problema: la golosina en forma de palabras del líder político o religioso de turno.. son siempre más deseables. Pensar aburre y cansa, no nos engañemos. Hilvanar un conjunto de pensamientos de forma lógica es una tarea ardua.
"No existe un camino regio para la geometría", le contestó el matemático griego Euclides a un príncipe que se quejaba de la dificultad que entrañaba seguir los razonamientos de su maestro. Por eso, el aprendizaje no es un paseo, ni siquiera una actividad divertida. La ciencia es apasionante, emocionante, asombrosa... pero no un parque de diversiones.
Miguel Angel Sabadell,
Muy interesante (edición para latinoamérica) Nº265 Noviembre 2007, pág. 11
Dificilmente podría estar más de acuerdo, un poco a modo de contestación para los prejuiciosos que consideran la ciencia aburrida, que en parte tienen razón. Pero aunque sea aburrido a veces, leer y comprender cómo y por qué funciona el mundo, es un gratificante ejercicio mental.
Creo que si estamos acá (que si existimos), debemos disfrutarlo y tratar de entenderlo. No solamente vivir porque el aire es gratis.. (por alguna razón se me cruzaron por la cabeza los infinitos quizes y notas de Facebook).
El ser humano prefiere un manto protector, una ideología a la que agarrarse o un pulgar que chupar, antes que arriesgarse y atreverse a.. pensar.
Vivimos en una civilización tecnológica, pero la nuestra es una sociedad mágica. Encendemos la luz y no la comprendemos; abrimos todos los días la heladera y desconocemos la Segunda Ley de la Termodinámica. ¿Pero es necesario conocerla? No, no necesitamos saber cómo se hace el pan para comerlo; ni entender la biología del caballo para montarlo. Pero sí deberíamos tener claro para qué sirve de verdad la ciencia. Para muchos, incluídos la mayoría de los intelectuales, la ciencia es como una caja negra a la que se le pide la solución de nuestros problemas médicos o ambientales. Muy pocos aceptan que sea un modo de pensamiento, y aún menos que forme parte de la cultura.
La belleza de la ciencia está en que nos induce a un cierto ascetismo al pensar; a no dejarnos llevar por nuestras ideas preconcebidas más queridas; a poner a prueba hasta el mínimo detalle; a ser críticos, a dudar.
La duda metódica es el cimiento de una mente lúcida. No valen las ideologías, ni los gurús; sólo las ideas segregadas por el cerebro. Unicamente existe un legislador último y definitivo: la realidad. Si nuestras ideas no se ajustan a la experiencia, por muy políticamente correctas que sean, debemos desecharlas. Pero no es fácil vivir así.
Decía Aristóteles que "las ciencias tienen las raíces amargas, pero muy dulces frutos", y ése es el problema: la golosina en forma de palabras del líder político o religioso de turno.. son siempre más deseables. Pensar aburre y cansa, no nos engañemos. Hilvanar un conjunto de pensamientos de forma lógica es una tarea ardua.
"No existe un camino regio para la geometría", le contestó el matemático griego Euclides a un príncipe que se quejaba de la dificultad que entrañaba seguir los razonamientos de su maestro. Por eso, el aprendizaje no es un paseo, ni siquiera una actividad divertida. La ciencia es apasionante, emocionante, asombrosa... pero no un parque de diversiones.
Miguel Angel Sabadell,
Muy interesante (edición para latinoamérica) Nº265 Noviembre 2007, pág. 11
Dificilmente podría estar más de acuerdo, un poco a modo de contestación para los prejuiciosos que consideran la ciencia aburrida, que en parte tienen razón. Pero aunque sea aburrido a veces, leer y comprender cómo y por qué funciona el mundo, es un gratificante ejercicio mental.
Creo que si estamos acá (que si existimos), debemos disfrutarlo y tratar de entenderlo. No solamente vivir porque el aire es gratis.. (por alguna razón se me cruzaron por la cabeza los infinitos quizes y notas de Facebook).
en base a esto: "La duda metódica es el cimiento de una mente lúcida. No valen las ideologías, ni los gurús; sólo las ideas segregadas por el cerebro. Unicamente existe un legislador último y definitivo: la realidad." digo, estoy de acuerdo, pero como comprobar la realidad, como saber que es real y que no, como saber porque las cosas son asi, no todo es ciencia, o no todo es ciencia como la conocemos, pensar ayuda muchas veces a resolver cosas que la ciencia no puede
ResponderBorrarObviamente que no se pueden tener todos los conocimientos del mundo, uno en su vida tiene que elegir por aprender algunas cosas, y dar otras por "mágicas" sin terminar de entenderlas por completo.
ResponderBorrarLa nota hace referencia a la gente que deja TODO por "mágico" y no entiende ni se preocupa por entender absolutamente nada. Y como dije, pareciera que viven porque el aire es gratis.
Sólo una buena formación, y la voluntad constante de tener una visión crítica y objetiva de las cosas (de algunos campos al menos) nos puede llevar a evolucionar como personas, y como especie.
Y de tratar de discernir qué es la realidad y qué es una obra de teatro, aunque eso es muchas veces más difícil.
totalmente de acuerdo con ezeqdb, saludos desde razas de perros
ResponderBorrarNo hay nada más gratificante que disfrutar de algo complejo, ya sea música, un chiste, un comentario o un artículo científico, cuando para entenderlo se necesita cierto conocimiento previo y/o un ejercicio mental para descifrarlo, cuando lo comprendés te sentís muy bien, como si algo dentro tuyo se llenara un poquito más, cuando ampliás tus conocimientos de esta manera, te sentís mejor, porque sos mejor.
ResponderBorrarEl Frita.
"El ser humano prefiere un manto protector, una ideología a la que agarrarse o un pulgar que chupar, antes que arriesgarse y atreverse a.. pensar".
ResponderBorrarHola Ezequiel! Esa frase es de Asimov!
Abrazo